Un masaje que se convierte en polvo
Vivimos en una sociedad con una velocidad muy alta, donde tenemos que hacer algo en todo momento y prácticamente no hay tiempo para pararse a descansar y relajarse un poquito. Probablemente, ese es uno de nuestro mayores errores. Sin embargo, el protagonista de esta escena es consciente de lo verdaderamente importante y visita a una masajista que conoce la mejor técnica para liberar tensiones. Después de un rato de masajito, decide pasar a la acción y estimularle el rabo con una pajilla. Como eso le parece poco y ella también quiere disfrutar un poco, se pone encima, se mete la polla en el coño y comienza a cabalgar.
1 Likes
1766 Visitas